El Estado Peruano busca el licenciamiento de las universidades, donde el mismo evalúa el cumplimiento de las Condiciones Básicas de Calidad (CBC) que, entre otros requisitos, exige que se tenga un centro de investigación, una infraestructura adecuada, laboratorios, bibliotecas, una excelente plana docente, y que se haga seguimiento a los graduados. Es la ardua tarea en que aún se encuentran gran cantidad de universidades del país y dentro de ellas la UNAP.
A este proceso se sumaron egresados forestales para brindar su ayuda voluntaria, que consistió en realizar una cruzada para adquirir materiales e insumos para subsanar observaciones que se tuvo en una pre auditoria, realizada también de manera voluntaria por profesionales forestales con amplia experiencia en la implementación y auditoría en Sistemas de Gestión de la Seguridad, Salud y Medio Ambiente.
Con la colecta se compraron pinturas, brochas, señaléticas, extintores, detectores de humo, tachos, lámparas de seguridad entre otros materiales y se puso en funcionamiento la cámara de secado de madera descompuesta hace dos años.
Asimismo se tuvo el apoyo de estos egresados para desarrollar estas actividades en el campus de Puerto Almendras, como la implementación de las rutas de evacuación, señalización y rotulado de equipos de laboratorio y otros trabajos necesarios para complementar la gran tarea realizada hasta el momento por los profesores, trabajadores de campo y administrativos de la Facultad de Ciencias Forestales.
Hay que desatacar la capacidad de reacción de los egresados forestales de la UNAP, quienes no dudaron ni un momento para responder a la convocatoria para apoyar a su facultad aportando económicamente, así como con su trabajo y conocimiento, con esto se demostró el cariño a su casa de estudio. Una merecida mención y agradecimiento a quienes sin ser forestales también aportaron a la cruzada mostrando su identidad por la educación universitaria en nuestra región.